Martes 20 de Agosto, 2024
España– María Branyas Morera, quien ostentaba el título de la persona más anciana del mundo desde hace un año, falleció el lunes a los 117 años y 168 días. El deceso ocurrió alrededor de las seis de la mañana en la residencia Santa María del Tura, en Olot, España, donde había vivido durante las últimas dos décadas.
Según confirmó su familia, María Branyas “se apagó durmiendo”, cumpliendo su deseo de partir en paz. Su hija menor, Rosa Moret, de 80 años, expresó que su madre siempre había querido un final sereno, sin sufrimiento. Los restos de María fueron incinerados este martes.
Un mensaje conmovedor fue compartido en la cuenta de X, gestionada por uno de sus yernos, donde se leía: “Y cuando mi voz calle con la muerte, mi corazón te seguirá hablando de amor” (Tagore). La publicación ha recibido cerca de 80.000 visualizaciones y numerosos mensajes de afecto.
La vida de María fue verificada por la Asociación Gerontology Research Group (GRG), que certifica la longevidad de personas supercentenarias. Según esta organización, María se ubica como la octava persona más longeva de la historia, siendo superada solo por once mujeres, todas ya fallecidas. El récord de longevidad sigue perteneciendo a la francesa Jeanne Calment, quien vivió 122 años y 164 días.
María, nacida el 4 de marzo de 1907 en San Francisco, Estados Unidos, de padres españoles, sobrevivió a la pandemia de COVID-19 en 2020 a la edad de 113 años. A pesar de su avanzada edad, nunca sufrió enfermedades graves, según su hija Rosa. Sin embargo, en el último año, su salud comenzó a deteriorarse, perdiendo visión, oído y memoria.
María Branyas Morera deja un legado de longevidad y fortaleza, habiendo vivido una vida plena rodeada de sus seres queridos.
