Martes 17 de Septiembre, 2024
Una serie de explosiones ocurridas este martes en los suburbios del sur de Beirut y otras zonas controladas por Hezbollah en el Líbano y Siria, dejaron un saldo de al menos tres fallecidos y más de mil heridos, según reportes de medios locales. Entre las víctimas mortales se encuentra una menor de edad y dos integrantes del movimiento chiita, uno de ellos combatiente e hijo de un diputado, según confirmaron fuentes cercanas al grupo.
Las autoridades libanesas han señalado que las detonaciones fueron provocadas por localizadores portátiles (buscapersonas) que portaban miembros de Hezbollah. Fuentes anónimas de la inteligencia militar y del propio grupo creen que los dispositivos podrían haber sido objeto de un ataque israelí.
Medios libaneses han informado que unas 1.000 personas resultaron heridas, de las cuales al menos cinco se encuentran en estado grave. Algunos de los heridos fueron trasladados a hospitales en Damasco y sus alrededores, debido a la gravedad de sus lesiones.
Imágenes compartidas en redes sociales y en los medios locales mostraban escenas caóticas en las calles de Beirut, con personas heridas, muchas de ellas presentando lesiones en las manos o cerca de sus bolsillos, lo que refuerza la teoría de que las explosiones ocurrieron a raíz de los dispositivos que llevaban consigo. Fuentes no oficiales también han indicado que altos dirigentes de Hezbollah habrían resultado heridos en las detonaciones.
Las autoridades continúan investigando el origen exacto de los incidentes mientras crece la tensión en la región debido a la posible implicación de actores externos.