Martes 30 de Septiembre 2025
SANTIAGO, RD.– El presidente de la República, Luis Abinader, reiteró este lunes que en su gestión no habrá espacio para la impunidad, al referirse al caso de Senasa y a la investigación sobre la muerte de cinco hombres a manos de la Policía Nacional en La Barranquita, Santiago.
Durante el encuentro LA Semanal con la Prensa, el mandatario aseguró que los actos de corrupción no tendrán cabida en su administración.
“Nosotros entregamos al Ministerio Público ese expediente (Senasa) para que realicen todas las investigaciones y vamos a esperar el resultado. Lo que hemos prometido y cumplimos es que no aceptamos corrupción y que vamos a desaparecer la impunidad que por décadas existió aquí, incluso con acciones del propio Gobierno”, expresó.
El jefe de Estado indicó que los hallazgos del órgano persecutor permitirán establecer medidas que eviten la repetición de este tipo de prácticas.
Caso La Barranquita
Al abordar la muerte de cinco personas durante un alegado intercambio de disparos con la Policía Nacional el pasado 10 de septiembre en el sector La Barranquita, Abinader manifestó su confianza en que el Ministerio Público esclarecerá los hechos y hará justicia.
“Lo que esperamos es que el Ministerio Público investigue y haga justicia”, afirmó, al tiempo de recalcar que su Gobierno no interviene en los procesos judiciales.
Recordó que por años la sociedad reclamó un Ministerio Público independiente de las presiones políticas, “y eso es lo que tenemos hoy”.
Mientras tanto, familiares de las víctimas insisten en que se trató de una ejecución múltiple y no de un enfrentamiento con agentes policiales.
Saneamiento del Arroyo Gurabo
En otro orden, el presidente destacó los avances del proyecto de saneamiento del arroyo Gurabo, en Santiago, obra que aseguró ha contribuido tanto a la reducción de la delincuencia como a la mejora del entorno ambiental.
Según explicó, la intervención permitió la eliminación de 30 puntos de drogas y una notable disminución de los niveles de violencia en las comunidades cercanas.
“Con este proyecto no solo hemos saneado el arroyo y mitigado las inundaciones, también hemos devuelto la tranquilidad a barrios que eran de difícil acceso para la Policía”, sostuvo.
El plan, con una inversión superior a los 3,265 millones de pesos, beneficia a 19 sectores y más de 12 mil familias. Incluye obras de agua potable, alcantarillado, espacios recreativos, deportivos y culturales, además de la reubicación de más de 1,200 familias en el proyecto habitacional Hato del Yaque.
De su lado, el director del Instituto Nacional de Aguas Potables y Alcantarillados (Inapa), Wellington Arnaud, calificó la obra como “la de mayor impacto social y medioambiental” del país, al transformar la vida de miles de familias que vivían en condiciones de extrema pobreza.
Para garantizar su sostenibilidad, se creó un organismo de gestión que integra al sector público, privado, juntas de vecinos y el ámbito académico.