Viernes 14 de Noviembre 2025
Santo Domingo.– El 12 de enero fue establecido como la fecha para iniciar el juicio preliminar contra Antonio y Maribel Espaillat, propietarios de la discoteca Jet Set, acusados por el Ministerio Público de responsabilidad penal en la tragedia ocurrida el 8 de abril, donde perdieron la vida 236 personas y más de 180 resultaron heridas durante un concierto del merenguero Rubby Pérez.
La audiencia fue fijada luego de que la Procuraduría depositara la acusación formal, en la que se les imputa a los hermanos los delitos de homicidio involuntario, además de golpes y heridas ocasionadas por negligencia. Ambos fueron arrestados en junio, aunque posteriormente obtuvieron la libertad bajo medidas cautelares.
Según los informes oficiales, el establecimiento operaba en condiciones deficientes, con serias fallas estructurales y de mantenimiento que comprometían la seguridad del público. Estas irregularidades, sumadas a fallos en la organización del evento, habrían contribuido de manera decisiva al fatal desenlace.
Durante meses, las autoridades han reunido pruebas documentales, testimonios y análisis periciales para sustentar la acusación. El juicio preliminar determinará si el caso avanzará a un proceso formal y cuáles serían las consecuencias legales para los imputados.
Los familiares de las víctimas han insistido en que el proceso se lleve con absoluta transparencia y rigor, subrayando la necesidad de que se establezcan responsabilidades claras y se adopten medidas que eviten tragedias similares. Las autoridades, por su parte, reiteran que la supervisión y el cumplimiento de las normas de seguridad en lugares de entretenimiento deben ser una prioridad nacional.
El caso Jet Set continúa siendo un punto de reflexión sobre los riesgos de la negligencia en eventos masivos y la importancia de fortalecer los controles en espacios destinados al público.
