Martes 09 de enero, 2024
Jerusalén (EFE).- El secretario de Estado de EE.UU., Antony Blinken, se reunió hoy con las principales autoridades de Israel como parte de su gira regional para evitar una mayor propagación de la violencia, mientras las fuerzas israelíes mataron a un comandante de Hizbulá en el Líbano por segundo día consecutivo.
Las tropas israelíes siguieron hoy, por 95º día, la ofensiva en Gaza, cada vez más centrada en el área central y sur, mientras el Ejército va entrando en una nueva fase del conflicto, y atacaron, a su vez, con fuerza en territorio libanés en una jornada de intenso fuego cruzado con Hizbulá, que se saldó con la muerte del jefe de su unidad aérea.
Fuerzas israelíes “eliminaron” este martes “al comandante de la unidad aérea de la región sur de Líbano”, dijo el Ejército israelí, en un ataque aéreo contra un vehículo mientras se celebraba el funeral de otro miliciano de alto rango del grupo chií que Israel mató ayer.
Lo identificó como Ali Hussein Barji, y lo acusó de “dirigir docenas de actividades terroristas contra Israel” con drones explosivos y de vigilancia, así como de un ataque hoy a un cuartel general del Ejército en el norte de Israel.
La muerte de este alto cargo de Hizbulá sucede después de que ayer mismo se matara, en otro ataque por aire, a Wissam Hassan Taweel, alto mando de las fuerzas especiales de élite Radwan, el cual también falleció cuando el vehículo en el que viajaba fue atacado.
Taweel fue la baja más importante del grupo desde el inicio de las hostilidades con Israel, el 8 de octubre, en una dinámica de tensión creciente con el Líbano, que se disparó el martes de la semana pasada, cuando un bombardeo en Beirut atribuido a Israel mató al ‘número dos’ de los islamistas palestinos de Hamás, Saleh Al Arouri.
Desde entonces, aumentaron los temores por el estallido de una guerra de envergadura entre Israel e Hizbulá, este último aliado de Hamás e Irán. Tras ello, países y poderes occidentales como Estados Unidos y la Unión Europea han intentado apaciguar tensiones para evitar la propagación de un conflicto a mayor escala en Oriente Medio.