Viernes 17 de Enero, 2025
El doctor Félix Antonio Cruz Jiminián, fiel devoto de la Virgen de la Altagracia, celebró una misa especial en su honor, tradición que ha mantenido durante 33 años consecutivos. La ceremonia, oficiada por el padre Daniel Mansiel, párroco de la iglesia San Pablo Apóstol, tuvo lugar en la Clínica Cruz Jiminián, ubicada en la Avenida Ortega y Gasset, en el sector de Cristo Rey, Distrito Nacional.
Durante el evento, Cruz Jiminián expresó su profunda gratitud hacia la Virgen, a quien considera un símbolo de protección espiritual para el pueblo dominicano. En su intervención, también agradeció a los asistentes por su apoyo constante y deseó un año lleno de bendiciones, destacando la importancia de la unidad familiar y la fe.
Un Llamado a la Fe y la Solidaridad
Conocido por su labor altruista, Cruz Jiminián aprovechó la ocasión para hacer un llamado a la ciudadanía a fortalecer su fe y ayudar a los más necesitados, siguiendo el ejemplo de la Virgen de la Altagracia. Además, reafirmó su compromiso con la medicina y su dedicación a brindar apoyo a las personas de escasos recursos.
La Virgen de la Altagracia: Símbolo de Protección
La Virgen de la Altagracia es venerada como la madre espiritual de los dominicanos desde el siglo XVI. Su festividad, establecida el 21 de enero, fue solicitada a la Santa Sede por Monseñor Arturo de Meriño, arzobispo de Santo Domingo, consolidando así su lugar especial en la fe y cultura del país.