Martes 22 de Julio, 2025
La Organización Mundial de la Salud (OMS) emitió una alerta tras la aparición de brotes significativos de chikunguña en varias islas del océano Índico, como Mayotte, Reunión y Mauricio. La enfermedad, transmitida por el mosquito Aedes, también se está extendiendo a naciones cercanas como Madagascar, Somalia y Kenia.
La jefa de arbovirus de la OMS, Diana Rojas, recordó que entre 2004 y 2005, un brote en esta misma región afectó a casi medio millón de personas. Por ello, instó a los gobiernos a tomar medidas preventivas para evitar una repetición de aquella crisis sanitaria.
Rojas advirtió que la chikunguña, aunque raramente mortal, puede provocar secuelas graves y discapacidades duraderas en un 40 % de los casos, lo que representa una carga considerable para los sistemas de salud y las economías nacionales.
Según la experta, alrededor de 5.600 millones de personas viven en zonas donde existe riesgo de transmisión. En países sin inmunidad colectiva, el virus podría llegar a afectar hasta al 75 % de la población. Un ejemplo reciente es la isla de Reunión, donde se estima que una tercera parte de sus habitantes ya ha sido infectada.
También se han identificado casos en países del sur de Asia como India, Sri Lanka y Bangladés. Frente a este panorama, la OMS urgió a los países con presencia del mosquito transmisor a actuar con rapidez, asegurando una detección temprana y un control efectivo de los brotes.
